La costumbre del café con churros gusta a propios y extraños y este año ha hecho época.
Para no llamar la atención ni sorprender a nadie, Mario termina su partida ganando con 1,31 horas en su reloj. Como gana, no se le puede decir nada.
Para igualar la contienda mi oponente, al que gané el año pasado, me arrolla en 22 movimientos y eso que me defendí con una Scheveningen que se supone que es sólida. Al rato como las tres partidas que quedaban estaban igualadas, les propusimos tablas en las tres. Después de darle algunas vueltas declinaron la oferta.
En un final de alfiles de distinto color con un peon de menos, Roy se deja el punto. En ese momento la partida de Pablo da la impresión de tablas y Felipe tiene un peón de mas. Ahora sí ofrece tablas el rival de Felipe. Se va con un NO y al ratito con un cerito. Muy bien Felipe totalmente entregado a la causa común del equipo.
Mas tarde en posicion igualada de peones, Pablo firma tablas por repetición de jugadas de su adversario. Así el encuentro termina con empate, lo que nos mantiene en la 19 posición de la tabla, cerca de la promoción, por cierto.
La semana que viene en Getafe, donde esperamos nos den el espaldarazo definitivo de ascenso.
El equipo A acusó el retraso de su tercer tablero, que se durmió plácidamente, que conste en acta.
Alejandro que pensaba jugar un Gambito de Rey, utilizó un Gambito Morra para tener iniciativa y ataque. Acertada decisión según mi punto de vista. Como a su oponente nadie le regaló los casi 2100 de Elo que presentaba, se defendió precisamente y con el cambio de damas llegó al final con el peon de mas, el del Gambito. Punto para el oponente.
Laro iba mas o menos apretado toda la partida, pero lo peor y lo que mas le agobiaba era el poco tiempo que le quedaba. En esos mismos apuros se colgó la Dama allá por el final.
Aníbal se enfrentaba a un rival con fuertes dolores de espalda. Tuvo su escusa y nuestro tablero le pasó por la piedra.
Aníbal se enfrentaba a un rival con fuertes dolores de espalda. Tuvo su escusa y nuestro tablero le pasó por la piedra.
Carlos, que al parecer tiene que reencontrarse con el ajedrez, no sabemos cuando habrán quedado... estuvo sufriendo casi todo el tiempo. El punto se lo llevó su oponente junto a una caca que llevaba pisada en su zapatilla, que olía desde mi sitio.
Y que decir de Leo que no hayamos dicho ya. Pues que ganó y que la próxima partida deja en cuadro a su equipo yéndose a esquiar, creo.
Seguimos estando en zona de ascenso y quedan dos partidas. Habrá que partirse la cara....la semana próxima en casa.
Por cierto quien tiene llaves?
Saludos cordiales.
Álvaro Dominguez Coig
Álvaro Dominguez Coig
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